El Festival de la Orquídea, celebrado anualmente desde 2001, ha sido declarado Patrimonio Natural, Cultural e Inmaterial. El municipio de Concepción ha reconocido la riqueza y el impacto del evento en la región.

En una nota de prensa, el  Centro para la Participación y el Desarrollo Humano Sostenible (Cepad), rememora que la primera edición del Festival se llevó a cabo con el objetivo de promover la orquídea nativa Cattleya nobilior como un recurso turístico distintivo, enmarcado dentro de un Plan de Dinamización Turística Municipal. Dicho plan, buscó diferenciar a Concepción y atraer turismo mediante una serie de actividades temáticas, que incluyen conciertos, concursos, danzas, trekking, senderismo, gastronomía, conferencias, visitas guiadas, juegos populares, recorridos por museos, ferias artesanales, y exposiciones de moda chiquitana.

Cattleya nobilior, que en sus inicios fue identificada como una especie en peligro de extinción, se ha convertido en el símbolo del municipio y ha llevado a la creación de viveros, áreas protegidas y campañas de sensibilización para su conservación. Este esfuerzo ha posicionado a Concepción como el Santuario de la Orquídea Boliviana, resaltando el compromiso del municipio con la preservación ambiental y la valorización de su patrimonio natural.

Respecto al impacto económico del evento, el Cepad informó que en tres días de actividades se percibe la misma cantidad de ingresos que en tres meses de turismo habitual, con una recaudación aproximada de 300 mil dólares. Este significativo aporte económico beneficia a diversos sectores como hotelería, gastronomía, transporte y artesanía. Además, contribuye a la conservación de la orquídea nativa y a la sensibilización sobre la importancia de proteger el medio ambiente.