En el acta suscrita este lunes entre las autoridades indígenas y los representantes del Ejecutivo, además de anular el acuerdo con las cooperativas mineras, también se establece que los planes de manejo de las tres áreas protegidas comprometidas, deben mantenerse vigentes conforme a lo establecido en la norma actual.
La incursión de menonitas está llegando a un territorio indígena intangible, que es San Antonio de Lomerío, el primer municipio indígena de Bolivia. La plataforma Global Forest Watch ha detectado más de 42 mil alertas de deforestación en los límites del territorio en el último año.
Como parte de la conmemoración del Día Internacional de las Mujeres Indígenas, ONU Mujeres hace un llamado a visibilizar el rol fundamental de las mujeres indígenas en la tarea de mantener y defender la identidad de sus pueblos. De esa manera reafirman su derecho, para que sus voces -diversas y muestra de la riqueza cultural que representan- se escuchen de manera fuerte y clara en todos los espacios en los que habitan, no solo en el hogar y la familia, sino también en el espacio político, social, económico y cultural.
En estas notas te invitamos a conocer a algunas bolivianas que inspiran por sus esfuerzos en pro de sus comunidades
El pueblo más lejano de la Chiquitania está en un área protegida nacional. Sin un camino estable, luz eléctrica por horas y un costo de vida alto; sus habitantes enfrentan la disyuntiva de conservar su entorno acechado por incendios, minería y la falta de actividades económicas rentables, entre otras amenazas.
Los relatores de Naciones Unidas hicieron llegar una “Carta de Alegaciones” al Estado, porque ven preocupante la aprobación de normas para fomentar la actividad de explotación aurífera a pequeña escala en el país, con los graves impactos que dicha actividad conlleva, por la contaminación.
La “XI Gran Marcha Indígena”, que lleva 22 días en Santa Cruz, se movilizó hoy hasta las instalaciones del INRA, para protestar por los derechos de las comunidades movilizadas.
Serían más de 5000 pobladores indígenas afectados por las inundaciones producto de la construcción de las represas, indican organizaciones indígenas y ambientales. Esto provocaría, por lo tanto, el desplazamiento de cientos de comuneros de sus territorios.
Los monitores socioambientales se encargan de verificar en campo la información satelital que indica dónde se encuentran los focos de calor y un posible incendio.
Alrededor de 50 monitores socioambientales de cuatro territorios indígenas participan del programa impulsado por el Centro de Estudios Jurídicos e Investigación Social.
Más de 476 millones de pueblos indígenas viven en 90 países de todo el mundo, lo que representa el 6,2% de la población mundial. Ellos son los poseedores de una gran diversidad de culturas, tradiciones, idiomas y sistemas de conocimiento únicos. Tienen una relación especial con sus tierras y tienen diversos conceptos de desarrollo basados en sus propias cosmovisiones y prioridades.
En el Día Internacional de los Pueblos Indígenas, compartimos algunas de las iniciativas de pueblos indígenas bolivianos s que buscan mejorar sus condiciones de vida sin perjudicar su entorno natural:
La comunidad indígena El Rancho, en San Javier, busca proteger un bosque rico en árboles de copaibo, de donde emerge un poderoso aceite medicinal. La zona, de 500 hectáreas de extensión, es también el hogar de 76 especies de animales silvestres, sobre todo mamíferos, que se encuentran bajo alguna categoría de amenaza.
Los habitantes de El Rancho, en San Javier, encontraron en el aceite de este árbol una alternativa sostenible para mejorar su economía y conservar su bosque. Ya iniciaron el proceso para convertir su territorio en área protegida comunal.
En 2015 comenzó la construcción del que sería “el túnel más largo de Bolivia”. Cinco años más tarde, la obra quedó abandonada, mientras que tres comunidades guaraníes y una zona urbana de Muyupampa, en Chuquisaca, sufren por falta de agua. Ahora claman a los Iyas o “dueños del territorio” que no los desamparen.
Durante años una mujer oriunda de una comunidad recóndita en Santa Cruz, elaboró hamacas, fajas y alforjas con sus manos. Un día un fotógrafo le habló de ella a un reconocido diseñador de modas. Ahí nació “Santo Corazón”, una colección de ropa exclusiva, inspirada en una cultura de la que cada vez quedan menos tejedoras tradicionales.
Rompiendo esquemas sociales y económicos, una asociación femenina apostó por extraer esencia de hojas silvestres para tratar males de forma natural. El mal estado del único camino para llegar a su pueblo es el principal obstáculo para avanzar.
Santa Rosa de la Mina ultima detalles para recibir visitantes que quieran conocer la historia de su iglesia, recorrer senderos, degustar comida típica y conocer sus artesanías. Un destino que requiere tres horas de recorrido.
La llegada de maquinaria para extracción de oro no cesa pese a las restricciones. Las comunidades se protegen, pero mantener los controles por más tiempo se hace cada vez más difícil.
La Región
Con el objetivo de fortalecer los programas proyectos y actividades para la conservación del medio ambiente, representantes de la Confederación de Pueblos Indígenas...