La Región
A cinco días del hallazgo de 35 cóndores andinos (Vultur gryphus) muertos en una quebrada del municipio de Cercado, Tarija, el viceministro de Medio Ambiente, Biodiversidad, Cambios Climáticos y de Gestión y Desarrollo Forestal, Magin Herrera, dijo estar “convencido” de que en este suceso están involucradas más de dos personas. Por las evidencias colectadas por el equipo técnico, se apunta a una muerte masiva por envenenamiento.
En una nota de prensa publicada de ABI, la autoridad dijo que “se continuará con las investigaciones hasta dar con los responsables de los hechos y sancionarlos con el mayor rigor de la ley”.
Una comisión multidisciplinaria de biólogos, veterinarios y abogados especialistas en fauna silvestre del Ministerio de Medio Ambiente, la Gobernación de Tarija y la Alcaldía de Cercado trabajan para determinar causas y detectar a los autores del hecho, tipificado como biocidio por las leyes bolivianas.
Herrera anticipó que para prevenir hechos similares se implementará un plan de acción para la conservación del cóndor andino, una especie “vulnerable”, según la Unión Internacional para la Conservación de la Naturaleza (UICIN). La misma es afectada por la actividad humana, incluida la pérdida de hábitat y la caza.
Los cadáveres de los cóndores, una cabra y dos perros fueron encontrados el último fin de semana a hora y media de Tarija, en la frontera con Argentina. Estas aves pueden medir hasta 1.22 metros y tienen una envergadura de hasta 3.20 metros.
En su momento, Herrera López dijo que el deceso pudo haber sido diez días antes de hallazgo, debido al nivel de descomposición que tenían.
Juan de Dios Garay, biólogo de la oenegé Nativa Bolivia, dijo que había 17 parejas de cóndores y un macho adulto. En ese contexto, podía haber crías y huevos sin eclosionar.
