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La Región
“Si en los periódicos y la prensa en general no sale esto, queremos que nos escuche, por lo menos en la calle, toda la gente que camina todos los días”.
Norka Paz, Knorke Leaf como firma sus obras, manifiesta así el sentir de sus compañeros. Son artistas jóvenes, otros con amplia trayectoria como ella, algunos que recién inician. A todos los une una consigna: lograr que la gente entienda que la lucha por el territorio y la vida es más que un eslogan; es una pelea por la subsistencia misma.
“La mayoría de las personas asumen que los bosques de la Amazonia solo son pulmones del mundo, pero en realidad son el corazón, son los que bombean todos los días millones de agua dulce. Y si no hay bosques, no vamos a tener agua”, dice Norka.
Aunque este movimiento nació ya hace un par de años, durante la pandemia 26 muralistas y grafiteros se autoconvocaron para plasmar sus obras en lugares públicos y en fachadas de sus propios domicilios.
El extractivismo, las amenazas a los territorios indígenas y campesinos, la destrucción de la biodiversidad. Todos ellos son temas de los que la sociedad civil habla y que los medios de comunicación no siempre reflejan. Pero que ahora “hablarán” desde las paredes.
Mira los murales y su ubicación
Desde distintas trincheras, los involucrados ya se habían expresado al respecto. Algunos estuvieron en territorios amenazados por el extractivismo y pintaron murales en comunidades afectadas. Es el caso de Nereta Movimiento Artístico, que expresó en las paredes su rechazo a la amenaza por proyectos hidrocarburíferos que sufre la reserva natural Tariquía, en Tarija.
Nook, Mat, Harry y Marcelo, de Santa Cruz, plasmaron sus obras en Vallegrande, donde el proyecto de la hidroeléctrica Rositas es una preocupación muy grande para los habitantes. Renate Hollweg, por su parte, apoyó el Festival de Mural El Canto de la Selva.
Esa visión y compromiso unieron a los participantes de este movimiento. Rápidamente organizaciones y páginas de redes sociales se sumaron para apoyar la difusión.
Los trabajos comenzaron este mes y esta semana se prevé la conclusión de las 22 obras, distribuidas en La Paz, Santa Cruz de la Sierra, Camiri (Santa Cruz), Tarija y Cochabamba.
En el caso de la sede de Gobierno, por ejemplo, es un mural colectivo de casi 20 metros en el que intervienen Knorke Leaf, Dems, Huayllas, Osek y Khespy. Está en el ingreso al barrio de Irpavi, en la zona sur de la ciudad. Se llama “Amazonia resiste” y plantea dos mensajes: los bosques son agua y la resistencia frente al extractivismo.
“A pesar de la pandemia y querer creer que la humanidad ha parado sus actividades destructivas, en realidad estas se han incrementado. Como es muy difícil resguardar las áreas protegidas, estas actividades han seguido avanzando”, lamenta la artista. Ante esta realidad, su respuesta y la de sus compañeros ahora se puede ver en muros de las calles.
Así fue el proceso de creación de los murales
Artistas participantes:
Cochabamba: Oveja, Compi22 (RDC), Puriskiri
Santa Cruz: AngySaku, Mat (DSk), Nook(DSk), Mag.muro, Mogli Montec, Jhoanna, Renate Hollweg.
La Paz: La Wasa, Dems, Huayllas, Khespy, Knorke Leaf, Osek, Hef, Domik.
Tarija: Nereta Movimiento Artístico (Sadid,Armando,YaNira,Miguel,Gabi,Karli) Enrique Vega
Camiri: Henry Zannier
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