Las autoridades evidenciaron la construcción ilegal del puente. Foto: Gobernación de Santa Cruz

Un equipo técnico del Servicio Departamental de Calidad Ambiental (Sdcam) de la Gobernación de Santa Cruz, se trasladó hasta la comunidad El Salvador (zona menonita El Roble), municipio de Roboré, para atender una denuncia de presunta contaminación y desvío del río Tucabaca, a causa de la construcción de un puente.

María René Barrancos, técnico del Sdcam, indicó que se tomó muestras del agua para medir el PH, oxígeno y otros parámetros, a efecto de determinar si la obra afectó la calidad del río, como también su recorrido. 

Detalló que el puente tiene 15 metros de largo por cinco de ancho, el cual está cimentado sobre una estructura de hormigón, con vigas transversales de metal y la superficie de madera. “El mismo, aparentemente ha sido construido de manera ilegal sin contar con Licencia Ambiental y los permisos correspondientes que son emitidos por el Servicio de Encauzamiento de Ríos, datos que serán corroborados en gabinete”, refiere una nota de prensa del ente departamental.

Foto: Gobernación de Santa Cruz.

“Hemos tomado todos los datos de campo y los analizaremos en gabinete, para posteriormente dar a conocer los resultados, tanto a la parte denunciante, como a todas las autoridades que tienen que hacerse cargo de la regulación y sanción de esta actividad”, puntualizó Barrancos.

A su vez, informó de que en el recorrido hasta el lugar, acompañados de ciudadanos perteneciente al movimiento Defensa del Valle de Tucabaca, se evidenció un desmonte en cinco predios. Se trata de un bosque primario con árboles de alto valor forestal con especies como: ceiba y roble, entre otros. Al respecto, la funcionaria indicó que se informará a la institución competente, la Autoridad de Bosques y Tierra (ABT) para que tome cartas en el asunto. 

Por su parte, Julio Zeber, del Movimiento Defensa del Valla de Tucabaca, lamentó que en la zona se estén incurriendo en infracciones de todo tipo: hídricas y forestales, con desmontes a suelo raso, sin respetar el Plan de Uso de Suelo (PLUS) con acciones que están prohibidas. 

“El Valle de Tucabaca y la mayor parte del Bosque Seco Chiquitano es de uso estricto forestal”, afirmó Zeber, quien pidió a las autoridades competentes asumir acciones al respecto.