La Región
El presidente Evo Morales anunció hoy la contratación de un Boeing 747 Súper Tanque, considerado uno de los aviones más grandes del mundo para apagar los incendios forestales en Santa Cruz. Se tomó la decisión, debido a que “no es suficiente enfrentar (el fuego) con los equipos que tiene el Estado boliviano”.
La medida llega más de diez días después de iniciado el fuego que, hasta ayer, se expandió a Puerto Suárez y al parque nacional Otuquis, según un reporte de la Gobernación de Santa Cruz. Así, estos dos puntos se sumaron a San José de Chiquitos, Roboré, San Rafael, San Ignacio y El Carmen Rivero Tórrez, entre otros.
Se espera que con la nave se sofoque los focos de calor, ya que se trata de una aeronave cisterna, que tiene la capacidad de almacenar 75 mil litros de agua.
“Esta mañana, en la reunión de gabinete que se realiza a las cinco de la mañana, hemos aprobado algunos temas importantes de emergencia. Primero se va a conformar un Gabinete de Emergencia Ambiental para hacer frente a los incendios en al Chiquitania”, dijo Morales en un acto público en Oruro, reportó la estatal ABI.
Dicho gabinete estará conformado por el vicepresidente Álvaro García Linera; el ministro de la presidencia, Juan Ramón Quintana; el ministro de Gobierno, Carlos Romero; el ministro de Medio Ambiente y Agua, Carlos Ortuño; el ministro de Desarrollo Rural, César Cocarico; y la ministra de Salud, Gabriela Montaño.
Avance de fuegos en Bolivia
Sobre los daños
René Guillén, doctor en biología y uno de los encargados de reforestar el parque nacional Kaa Iya tras la construcción del gasoducto Bolivia – Brasil, explicó a La Región que en estos casos se debe hacer una evaluación, una vez que pase la primera lluvia. Esto porque ahí se verá el grado de regeneración de la flora.
Además hay que tener en cuenta que se afectó bosque Cerrado y bosque Chiquitano, cada uno de los cuales tiene diferentes características forestales.
“En el caso del Cerrado, la mayoría de especies que viven ahí son resistentes a quemas. Son de cortezas gruesas, corchozas. No es la primera vez que el sector se quema, así que hay que ver la intensidad (del fuego) que ha pasado por la vegetación”, explicó.
Para ejecutar el trabajo, recomienda hacer parcelas de muestreo, para decir con propiedad en cuánto tiempo se podrán recuperar y cuán grave fue el daño para los troncos de los árboles.
“En el tema de fauna habría que ver qué bosques remanentes han quedado, porque muchos animales seguro se fueron ahí. Algunos, como las tortugas y algunas víboras, armadillos, tatús, seguro fueron afectados, pero hay que tener en cuenta que muchos forman madrigueras debajo la tierra para protegerse. En ambos casos (flora y fauna), hay que hacer un muestreo en diferentes lugares, y de acuerdo a eso determinar las acciones”.
Para llevar adelante este trabajo, se necesita biólogos especializados en herpetología (experto en animales que se arrastran), zoólogo, mastozoólogo (especialista en mamíferos), ecólogo y un forestal, entre otros.
Situación actual
Entretanto, el reporte de la Gobernación de Santa Cruz hasta el mediodía de ayer daba cuenta de que el fuego que surgió en Roboré, “salpicó” al parque nacional Otuquis. Así también, un incendio que se originó en Paraguay afectó a la misma zona y llegó a Puerto Suárez, por lo que el concejo de ese municipio analizaba la posibilidad de declararse en desastre para pedir apoyo al gobierno departamental.
Sobre la ayuda para las áreas afectadas, que se multiplicó gracias a la solidaridad de la ciudadanía, el secretario de Seguridad Ciudadana, Enrique Bruno, pidió que se centralice en el Centro de Operaciones de Emergencia Departamental (COED), que está funcionando en el cuarto anillo de la avenida Alemania. Esto para organizar la distribución.
“Cuando llegan donaciones directas (a los sitios del siniestro), sin coordinación, se corre el riesgo de que esto no sea necesidad para el lugar y no tenga logística para la distribución. Nosotros estamos coordinando directamente con los centros de emergencia de Roboré, San José, San Ignacio, San Rafael”, dijo.
En temas más técnicos, la secretaria de Medio Ambiente, Cinthia Asín, reiteró el pedido de no realizar quemas, porque si bien se controló varios focos de quema, la zona es propensa a la reactivación, debido a los fuertes vientos.
Informó que hasta julio se contabilizaron 310 mil hectáreas afectadas por incendios en el departamento, mientras que en lo que va de agosto, la cifra subió a 654 mil hectáreas. Áreas protegidas como Tucabaca y ahora Otuquis están dentro de los lamentables números.
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