A 120 kilómetros de la capital de Beni, Trinidad, comunidades del Territorio Indígena Multiétnico (TIM) soportan cuatro incendios forestales y más de 500 focos de calor en medio de una ola de intenso calor y sequía. Así, Jorori, Naranjal, San Salvador del Apere y Retiro sufren por la situación, siendo esta última la más afectada, ya que se quemó una vivienda.
En un recorrido que hizo La Región por la zona, ubicada al sur del departamento, evidenció la situación en la que se encuentran habitantes de este territorio. La baja humedad y la intensa temperatura, que superó los 43 grados el lunes, son factores que incidieron en la propagación del fuego, que según personas del lugar se inició en haciendas ganaderas e ingresó a zonas boscosas debido a los fuertes vientos.
El monitoreo de la Fundación ORE permitió detectar 1024 focos de calor entre el 8 y el 15 de noviembre, en el TIM. Por ello, este martes 15, la Gobernación de Beni se declaró en desastre, debido a que los incendios también azotan la zona de Rurrenabaque y San Buenaventura, en el norte de La Paz.
Según el diagnóstico, los focos de calor se concentran en zonas de pastizales, que están provocando incendios en bosques cercanos.
