Cada seis segundos se pierde un área de bosque tropical equivalente a un campo de fútbol. Así desaparecieron 11.9 millones de hectáreas en todo el planeta durante el 2019.
Para solucionar este problema, muchos gobiernos han recurrido a la reforestación, es decir, a plantar árboles. Sin embargo, varios científicos recomiendan que en lugar de reforestar, se opte por restaurar esos espacios.