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La extracción de oro en pequeña escala es una de las mayores fuentes de contaminación por mercurio en América Latina. En la región amazónica de Bolivia, como en otros países, esta práctica abarca varias dimensiones como: el comercio, las necesidades sociales o la supervivencia de las personas que entran a este rubro.
“El mercurio se hace una amalgama (mezcla de dos o más metales), que al final de todo un proceso, llega a la atmósfera (evaporación), a los suelos o al agua”, explica la bióloga boliviana Karen Losantos Ramos.
Esta materia se dispersa y puede quedar en las partes más profundas del agua. Allí las bacterias hacen que tome otra forma química, que puede ser absorbida por seres vivos. A su vez, los peces se alimenten de ella. Esto en Biología se llama cadena trófica. El último eslabón es el ser humano que consume esos pescados. “Este mercurio no es que de alguna forma va a desaparecer. Ya está en el ambiente y va a seguir corriendo en el ambiente por muchísimo tiempo”, dice la experta basada en artículos y datos recolectados al respecto.
La explicación de lo que sucede con el mercurio que se usa en la extracción aurífera fue plasmada por la bióloga en un gráfico de la aplicación estadounidense BioRender bajo el título: «Efectos de la actividad minera de oro sobre la contaminación por mercurio en la Amazonia». La herramienta digital permite hacer diagramas de ciencia de manera rápida, precisa y accesible al público objetivo.
Precisamente la firma lanzó un concurso para que científicos puedan explicar sus trabajos de investigación usando esta tecnología. Se premiará en diferentes categorías y en diferentes niveles a todos los participantes. En el caso del tema del mercurio está en la categoría de conservación y educación ambiental.
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Para ayudar a que Karen gane, se debe entrar en este enlace. Aunque los detalles están en inglés, la explicación es la mencionada. Hay un botón de “Vote”, que pedirá un registro sencillo, de nombre y correo electrónico. La fecha tope para hacerlo es este 12 de junio.
La otra investigación con la que participa Losantos titula: “Bioenergética del cerebro de grillos rastrea la neuroprotección mediada por Eritropoyetina”.
Aunque está más destinada a un público científico, tiene que ver con una hormona que protege al cuerpo mediante la producción de glóbulos rojos. Luego de hacer estudios en grillos, bajo la tutela del doctor Jorge Solís, de la universidad de Laval, Canadá, se encontró que la función de la eritroproyetina también actúa en la protección en el cerebro y que esta acción es mucho más antigua que la función de protección de glóbulos rojos. Un gran hallazgo para los biólogos moleculares.
Si quiere apoyar esta iniciativa, la votación debe hacerse en este link La fecha tope también es el 12 de junio.
*Karen Losantos Ramos es especializada en biología molecular. Ha hecho investigaciones en biología de la conservación, biotecnología vegetal, biotecnología para desarrollo. Hizo pasantías en universidades de Suecia, Japón y Canadá.
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